martes, septiembre 05, 2006

El Reloj de la Vida

salí de aquella casa a un terreno irregular, con pastos altos y un poco secos porque terminaba el verano, entre los matorrales distingo una especie de estructura cuadrada irregular, me acerco y veo que es como un gran rompecabezas vacio en el centro.
Había alguien conmigo, alguien que sabía hacer funcionar la maquina. Estando dentro de ella él la activo, y una pieza que parecía una estrella, o una luna, se movió de una esquina a otra de la maquina y otras se empezaron a acomodar de la mima manera, y me moví para dejar pasar una pieza grande que se desprendio de uno de los muros, le dije al tipo que mejor nos fuéramos al extremo donde la salida estaba mas próxima, ya que en cualquier momento nos quedaríamos sin espacio para salir, o peor podríamos ser destrozados por el movimiento irrefrenable de las manecillas. Estando allí algo entro desde fuera, un sujeto alto que al traspasar la puerta su cuerpo se transformo en algo reptiliano, y nosotros casi arrastrados por él al interior, logramos salir.
Y al volver observar había ahora en el interior, vida, distintas criaturas, terrestres y aladas y también vegetales y comenzaban a destrozarse entre sí, era como ver en un pequeño espacio todo un proceso evolutivo avanzando y sucediendo en pocos minutos, y la única conclusión era que había salido mal. Había que recomenzar. Y por segunda vez todo comenzó... y esta vez se parecía mas a nuestro mundo.

2 comentarios:

Juanjo dijo...

Por alguna extraña razón me hizo recordar la saga de libros Hyperion y los juegos de computador Los Sims y Blanco y Negro.

No has pensado en hacer guiones?

A_ROJO dijo...

mi taza de café de la oficina.. en ciertos días se transforma en una taza de la vida...

con su propio ecosistema.

dura hasta que la lavo y me tomo otro café.